La Voz del Interior – 16 de Diciembre de 2012
Cristina Gómez Comini, lo suyo es la danza, y con ella lleva toda la vida.
Lo suyo es la danza, y con ella lleva toda la vida. Pero es más que bailarina; es actriz, coreógrafa, directora y dramaturga. Se formó en el Seminario de Danza de la Provincia, en el Instituto Superior de Arte del Teatro Colón y en el Taller de Danza Contemporánea del Teatro San Martín de Buenos Aires. Fue discípula de Maurice Béjart en Brujas, Bélgica. Desde hace 19 años dirige la compañía Danza Viva, con la que ha recogido numerosos reconocimientos. Agradece esas distinciones, pero está convencida de que le falta mucho por hacer. “Siento internamente que estoy en el camino, que me faltan millones de cosas por hacer y que tengo que investigar cómo hacerlas”, asegura.
Entre sus frases preferidas, está una de Deleuze a propósito de Bacon: “Dice que en arte no se trata de imitar, copiar ni inventar; se trata de captar energías. Me identifico con eso: captar lo que está y no se ve”.